El río Tunjuelito, una víctima de la contaminación sistemática en Bogotá.
El río Tunjuelito o Tunjuelo, es el río más largo de la ciudad, con 73 kilómetros de distancia, nace en el embalse de Chisacá, localizado en el páramo de Sumapaz en el extremo suroriental de Bogotá, atraviesa la zona sur de Bogotá y en la localidad de Bosa desemboca en el río Bogotá, que a su vez es afluente del río Magdalena.
El río Tunjuelito hace parte del ecosistema de la ciudad, ofertando servicios ecosistémicos de abastecimiento, regulación y soporte cultural para las comunidades aledañas, sin embargo, se han perdido con el avance del tiempo y del incremento de actividades altamente impactantes, entre ellas la construcción de canteras para actividades mineras, el crecimiento urbano no planificado, y la industrialización del sector, con procesos altamente contaminantes como la preparación de detergentes, actividades de sacrificio de animales, la ubicación del relleno sanitario Doña Juana y sus conexiones directas con el río y la instalación de curtiembres, esto último ha derivado en que los vertimientos sean tributados al río Tunjuelito, desencadenando una de las problemáticas más adolecidas por las comunidades del sur de Bogotá.
El río Tunjuelito lleva esperando mucho tiempo una respuesta eficaz y sostenible. Fotografía tomada del Blog del Tunjuelito.
La Corporación Cambio Sostenible hace un llamado a la acción en las comunidades para frenar la contaminación de ecosistemas y recursos naturales, esto como estrategia en la reducción del cambio climático, entre ello ha realizado actividades de encuentro con comunidades en Soacha (Cundinamarca) y en Bogotá al sur de la ciudad, en localidades de Ciudad Bolívar, Bosa, Tunjuelito y Usme, en las que ha identificado junto con otras organizaciones sociales como prioritaria la situación del río Tunjuelito.
La minería ilegal está poniendo en riesgo al río Tunjuelito. Créditos a la fotografía: El Espectador
Entre estas actividades la Corporación ha realizado un diagnóstico socioambiental junto a lideres y líderesas de la zona y en cuanto al control de la contaminación, tanto en el cuerpo de agua como a los alrededores, se han identificado múltiples riesgos de no actuar de manera oportuna en la gestión del río Tunjuelito. Entre los hallazgos más importantes se encuentran:
CALIDAD DEL AIRE:
Las condiciones ambientales que inciden directamente en las comunidades aledañas no son prioritarias, pues la aparición constante de olores ofensivos y la concentración contante de contaminantes en la atmosfera en la zona, consecuencia de actividades mineras e industriales, no se responden con estrategias institucionales por parte de las autoridades en el control de la contaminación.
“Eso ni que llueva, cuando hay sequía en la zona -porque cada vez más los días secos se sienten en esta zona de la ciudad-, el aire se siente cargado de polvo, los olores son insoportables que emanan del Tunjuelito, y cuando llueve, los olores son más fuertes” Claudia*
“Aquí no hay quien viva feliz cerca del río Tunjuelito, y cuando llego con mi esposa al portal de Transporte Tunal que es cercano al río, el olor es muy desagradable, no sé si a las autoridades les incomoda” – José.
VERTIMIENTOS
La situación de contaminación directa por parte de vertimientos ilegales en el río Tunjuelito es una discusión que nunca acaba, las alarmas por el sector mínero, de sacrificio de animales, de procesamiento de cuero animal, y ahora la emergencia en el relleno sanitario de la ciudad por la infiltración de lixiviados en el río Tunjuelito, los líderes comunitarios han elevado peticiones a la autoridad, no obstante, los eventos de vertimientos siguen sin ser controlados.
“Esta situación de vertimientos no le parece dar importancia la autoridad, son aguas negras las que corren en el río Tunjuelito, un río que fue sustento para los primeros en llegar, ahora solo es una cloaca del sur de la ciudad” Don Manuel.
SALUD PÚBLICA
Los riesgos a la salud humana son altos, adicional a que es una zona de alto impacto por las actividades mineras, industriales y comerciales, las personas tienen que padecer las situaciones en salud pública, entre ellas vectores de enfermedades y sintomatología de infecciones respiratorias.
“Vivo por el sector de Villa del Rio y además del mal olor del río, la irritación en los ojos y la contaminación de las industrias me han hecho enfermar varias veces” – Angelica.
INSEGURIDAD
Vivir en los alrededores del río Tunjuelito también supone un riesgo para la integridad de las familias, las cuales sienten que su calidad de vida es menor con respecto a otras zonas de la ciudad y que los delitos que ocurren en los alrededores del río son más frecuentes.
“Hurtos, agresiones sexuales, microtráfico, delitos ambientales, asesinatos, lamentablemente no es un sitio seguro el río Tunjuelito, y no lo puedo transitar sola…siento miedo de lo que sucede allí” – Andreina.
Los hallazgos de tales reportes permiten entender que la lucha contra el cambio climático desde el freno a la contaminación a cuerpos de agua requiere de acciones directas, puntuales, con una respuesta social y de incidencia en las políticas de control y gestión ambiental. ¿Podrá la generación de jóvenes 2030 liderar el cambio y la conservación de sus recursos naturales o quedará completamente vulnerable a los efectos del cambio climático?
Cambio Sostenible seguirá promoviendo acciones por lograr un cambio sostenible movilizando más corazones y liderazgos en la lucha contra el cambio climático desde la comunidad y para la comunidad, después de todo solo tenemos un planeta.
*Los nombres de los líderes y lideresas fueron alterados para resguardar su identidad y seguridad
¡Rumbo a la Equidad social!